Lo que durante una época fue la terminal de tren que comunicaba el Alto Manhattan desde la 145th Street al Norte hasta el City Hall al sur atravesando toda la avenida Broadway, hoy en día está abandonada. La estación del City Hall permaneció en funcionamiento por tan solo 41 años desde que se inauguró el servicio de transporte en 1904.

La estrecha curva al final de la estación se convirtió en un peligro para los nuevos trenes que poco a poco dejaron de tener tráfico de pasajeros los mismos que preferían hacer uso mejor de la estación cercana, Brooklyn Bridge, razón por la cual las autoridades decidieron cerrarla definitivamente.

En 1995 se lanzó un proyecto para que fuera restaurada y se convirtiera en parte del museo de tránsito, lo que nunca se llegó a realizar.

El diseño de la estación estuvo a cargo del arquitecto español Rafael Gustavino quien también es conocido por su trabajo del Oyster’s Bar y su “Galería de los Suspiros” en Grand Central.


En la actualidad tienes la posibilidad de ver parte de lo que esconde la estación del City Hall, lo puedes hacer desde la línea de tren 6, solo tienes que esperar hasta la última parada en Brooklyn Bridge y cuando el tren cambie de ruta para volver a la vía de alfrente que lo llevará al Bronx debe pasar por los pasillos escondidos de la antigua estación, una experiencia única que te permitirá ser testigo del pasado de Nueva York.



Si te gustó la nota te invito a que la compartas con tus amigos, cualquier comentario o suguerencia siempre es bienvenida y lo puedes hacer en la parte inferior de la nota. También me puedes seguir en Facebook
Fuente: Daily.co.uk
Comments are closed, but trackbacks and pingbacks are open.